Natanael Cano, el cantante de corridos tumbados, reaccionó a una amenaza emitida en Hermosillo, Sonora, a través de una manta presuntamente firmada por un grupo armado. El mensaje acusaba a músicos como Cano de colaborar económicamente con actividades ilegales y advertía sobre posibles represalias si no dejaban de hacerlo. El artista respondió en Instagram de manera irónica, publicando una imagen de colchas con su imagen y comentando: «Las únicas mantitas que me preocupan ahorita». Sin embargo, eliminó la publicación poco después.

La narcomanta, encontrada en las inmediaciones de una preparatoria, generó preocupación en el ámbito del regional mexicano. El texto advertía a los músicos que se enfocaran en su profesión y cesaran supuestas colaboraciones ilegales, insinuando graves consecuencias en caso de desobediencia.

Además, Cano enfrenta problemas legales derivados de un incidente ocurrido en marzo, cuando fue vinculado a proceso por sobornar a policías en Hermosillo tras ser detenido por conducir a exceso de velocidad en un vehículo sin placas. Según la Fiscalía de Sonora, el artista intentó evitar una multa ofreciendo dinero a los oficiales.

Estos hechos han puesto al cantante bajo el escrutinio público, destacando las tensiones entre el ámbito musical y los problemas legales que enfrentan algunos exponentes del género.