Brianna Alvelo, una repartidora de pizza de 22 años, fue arrestada en Kissimmee, Florida, tras apuñalar a un cliente que supuestamente le dejó una propina insuficiente. El incidente ocurrió en un motel donde la víctima, su pareja y su hija de 5 años celebraban un cumpleaños. Alvelo regresó al lugar acompañada de un hombre armado, irrumpió en la habitación y atacó a la víctima con un cuchillo.
Según informes, el cliente había pagado con un billete de 50 dólares por una cuenta de 33, pero ante la falta de cambio, la repartidora recibió solo 2 dólares de propina. Además del ataque, los sospechosos se llevaron pertenencias de la habitación.
La mujer enfrenta múltiples cargos, incluyendo intento de asesinato, allanamiento de morada, secuestro y asalto agravado. Durante una audiencia inicial, la Fiscalía pidió que no se le concediera libertad bajo fianza, argumentando la gravedad del delito, que podría ser castigado con cadena perpetua.
En respuesta, la cadena Marco’s Pizza, donde trabajaba Alvelo, emitió un comunicado lamentando profundamente lo sucedido y asegurando su cooperación con las autoridades en la investigación.