La incidencia de contagios por rickettsia en Sonora aumentó un 44% al cierre de 2024, alcanzando 174 casos, según la Secretaría de Salud. Sin embargo, la letalidad de la enfermedad disminuyó significativamente, pasando del 54.5% en 2023 al 37% en 2024, con 64 fallecimientos registrados. Este cambio marca un avance en la atención y tratamiento de la enfermedad transmitida por garrapatas.

En términos geográficos, los municipios más afectados fueron Álamos, Empalme, Guaymas y Etchojoa, principalmente en el sur del estado. Hermosillo, con 82 casos y 24 fallecimientos, también mostró una mejora respecto al año anterior, cuando 41 de los 72 casos registrados resultaron fatales. La capital sonorense continúa siendo un punto crítico debido a su alta predisposición histórica a la proliferación de esta enfermedad.

A pesar del aumento en contagios, las estrategias implementadas parecen estar logrando reducir la severidad del impacto, mostrando la importancia de reforzar las medidas de prevención y control en las regiones más vulnerables.